¿Qué tanto me quiero?
El amor propio es elemento mas importante para que cualquier persona lleve una vida satisfactoria, la base es la familia. Los padres a través del amor, la aceptación y los cuidados que les proporcionan a los hijos les demuestran lo importante que son para ellos.
Conforme se crece, la seguridad, el valor, respeto y satisfacción de uno mismo que es como se le define. al amor propio y autoestima, deben estar vinculados con el auto conocimiento. Esto significa saber cuales son tus cualidades y fortalezas pero también tus defectos y debilidades.
Si no te conoces, es porque no te interesas y probablemente no te quieras, pero si te amas estarás dispuesto a saber de ti, a aceptarte y a trabajar para reforzar todo aquello que te hace sentir completo, pero también eliminar o cambiar todo lo que te limita.
Date cuenta de lo especial que eres simplemente por ser tú, y verás que terminarás por admirarte.
Lo que importa es lo de adentro porque eso es lo que queda para siempre. Lo exterior se va con el tiempo. Pero hay gente que no puede entenderlo y no logra aceptar su físico. Y, a veces, eso se termina transformando en un tema bastante complejo. Muchas preguntas se harán las chicas que lo sufren: ¿Por qué nos hacemos esto? ¿Por qué a mí? ¿Por qué no nos aceptamos como somos? ¿Por qué intentamos cambiar nuestra imagen? ¿A quién tratamos de complacer? ¿A nosotras o al mundo? ¿Quién impone las reglas? ¿Cuándo fue el momento en que todo se hizo tan intenso? ¿Por qué no nos contiene nadie? ¿Nadie intenta ayudarnos? ¿O somos nosotras las que no nos dejamos ayudar? ¿Hasta cuándo? ¿En algún momento vamos a parar? ¿Por qué y desde cuándo existe el estereotipo perfecto? ¿CUÁL ES ESE ESTEREOTIPO? ¿Quién lo impuso?
Hay dos tipos: están las que lo ocultan y las que lo demuestran tanto que hasta la gente llega a pensar que lo hacen sólo para llamar la atención. Generalmente lo sufren desde chicas. No hace falta aclarar que todo esto sale de sus cabezas, todo es psicológico. Dentro de ellas llueve y parece que nunca va a parar. Y no se dan cuenta que, en algún momento, tiene que parar. El no estar conforme con ellas mismas y el siempre quejarse de algo, las hace sentir que no merecen nada, ni amigos ni familia ni AMOR. Y, dependiendo de la contención que tengan, este sentimiento puede llegar a transformarse en una enfermedad corporal, en las conocidas “Bulimia” y “Anorexia” o en la autoflagelación. Siempre está la persona que les dice: “come que te vas a volver anorexia”, “estás bien”, “no hagas caso a lo que te dicen”, “no hagas caso a lo que piensas”, “deja de ser tan negativa contigo misma”, “siempre lo mismo”, “siempre te quejas de algo nuevo”, “si no te quieres tu, no te va a querer nadie”. ¿Cómo hacer para que todo eso les entre en la cabeza? ¿Cómo hacer para que entiendan que lo físico no es lo importante y que merecen ser felices? Muchas recurren a los psicólogos. Otras, buscan apoyo en sus amigos y familiares.
El amor propio es elemento mas importante para que cualquier persona lleve una vida satisfactoria, la base es la familia. Los padres a través del amor, la aceptación y los cuidados que les proporcionan a los hijos les demuestran lo importante que son para ellos.
Conforme se crece, la seguridad, el valor, respeto y satisfacción de uno mismo que es como se le define. al amor propio y autoestima, deben estar vinculados con el auto conocimiento. Esto significa saber cuales son tus cualidades y fortalezas pero también tus defectos y debilidades.
Si no te conoces, es porque no te interesas y probablemente no te quieras, pero si te amas estarás dispuesto a saber de ti, a aceptarte y a trabajar para reforzar todo aquello que te hace sentir completo, pero también eliminar o cambiar todo lo que te limita.
Date cuenta de lo especial que eres simplemente por ser tú, y verás que terminarás por admirarte.
Lo que importa es lo de adentro porque eso es lo que queda para siempre. Lo exterior se va con el tiempo. Pero hay gente que no puede entenderlo y no logra aceptar su físico. Y, a veces, eso se termina transformando en un tema bastante complejo. Muchas preguntas se harán las chicas que lo sufren: ¿Por qué nos hacemos esto? ¿Por qué a mí? ¿Por qué no nos aceptamos como somos? ¿Por qué intentamos cambiar nuestra imagen? ¿A quién tratamos de complacer? ¿A nosotras o al mundo? ¿Quién impone las reglas? ¿Cuándo fue el momento en que todo se hizo tan intenso? ¿Por qué no nos contiene nadie? ¿Nadie intenta ayudarnos? ¿O somos nosotras las que no nos dejamos ayudar? ¿Hasta cuándo? ¿En algún momento vamos a parar? ¿Por qué y desde cuándo existe el estereotipo perfecto? ¿CUÁL ES ESE ESTEREOTIPO? ¿Quién lo impuso?
Hay dos tipos: están las que lo ocultan y las que lo demuestran tanto que hasta la gente llega a pensar que lo hacen sólo para llamar la atención. Generalmente lo sufren desde chicas. No hace falta aclarar que todo esto sale de sus cabezas, todo es psicológico. Dentro de ellas llueve y parece que nunca va a parar. Y no se dan cuenta que, en algún momento, tiene que parar. El no estar conforme con ellas mismas y el siempre quejarse de algo, las hace sentir que no merecen nada, ni amigos ni familia ni AMOR. Y, dependiendo de la contención que tengan, este sentimiento puede llegar a transformarse en una enfermedad corporal, en las conocidas “Bulimia” y “Anorexia” o en la autoflagelación. Siempre está la persona que les dice: “come que te vas a volver anorexia”, “estás bien”, “no hagas caso a lo que te dicen”, “no hagas caso a lo que piensas”, “deja de ser tan negativa contigo misma”, “siempre lo mismo”, “siempre te quejas de algo nuevo”, “si no te quieres tu, no te va a querer nadie”. ¿Cómo hacer para que todo eso les entre en la cabeza? ¿Cómo hacer para que entiendan que lo físico no es lo importante y que merecen ser felices? Muchas recurren a los psicólogos. Otras, buscan apoyo en sus amigos y familiares.
“Eres tan cruel cuando hablas de ti misma,
estás equivocada
Cambia las voces de tu cabeza
haz que ellas te acepten”
Todos buscamos la aceptación del resto. Hombres,
mujeres, niños y, sobre todo, los adolescentes. Algunos antes; otros,
después, pero, finalmente, logramos darnos cuenta que, en realidad, nadie tiene la verdad absoluta ni el poder de criticarte y hacerte sentir inferior. Que no necesitamos la aprobación de nadie, sólo la de nosotros mismos. Y para cerrar, te aconsejo lo siguiente:
“No hagas caso a las críticas porque están en todos lados.
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